20 octubre 2010

Diga 33

Tempus fugit que dirían los clásicos. O simplemente esa jodida sensación de que el tiempo se escapa, como me digo yo casi cada día.

Y 1994 es un año que queda lejos, a cientos de miles de kilómetros de nostalgia, digo de distancia. No es que aquel año fuera extraordinario para mí (tenía por entonces 17 años y bastante tenía con sacudirme una adolescencia infinita), pero en aquellos días el genial Kurt Cobain decidió sentarse sobre un taburete de los estudios de Sony en Nueva York.

Rodeado de su banda, dedicó unas palabras al público, pasó sus dedos por las cuerdas de la guitarra y tiró de su voz desgarrada para firmar el que es, y no hay quien me lo rebata, uno de los mejores discos de la historia, el Unplugged in New York.

Hoy, 16 años después (¡madre mía!), ese lp ha dejado de ser un simple casete para convertirse en un cd. Era una tarea que tenía pendiente, olvidada bajo toneladas de polvo y que al fin he conseguido cumplir.

El día de esta singular hazaña, el 20 de octubre de 2010, podría parecer tan rutinario como cualquier otro. Pero es el día previo a que alcance los 33. Y desde que pasé la treintena cada año me sienta como una puñalada.

Bueno, ya esta dicho: 33. Al final no ha sido para tanto.




Nirvana - Come as you are

(La canción va dedicada a Ramoncín, of course)

2 comentarios:

Faro dijo...

Felicidades buen hombre!!

El Unplugged fue para mi el primer cd que le regalé a mi hermana. Un cd de esos trampa, de los que regalabas para poder tener tú una copia. Y estoy contigo, es uno de los mejores discos de la historia.

jqn dijo...

Ahora voy a intentarlo yo: 35!! Ala, ya lo he dicho!!

Pues oye, a mi me sigue sentando mal...

A parte de eso, solo añadir que, AUNQUE SOMOS JÓVENES, también tengo esa sensación de que se escapa el tiempo... (y más últimamente). Y la verdad, poco mas podemos hacer... nos pilla todo lejos (hablo de distancia) y con poco tiempo libre... en fin... Pero aún hay tiempo para que cambien las cosas, no?